la isla de Palma recibe, como bien es sabido, los sobrenombres de ‘isla verde’ o ‘isla bonita’. En el bosque de Los Tilos o Los Tiles (su nombre oficial), una reserva perteneciente al Parque Natural de las Nieves, se puede entender muy rápidamente el porqué de tales apodos. E, incluso, puede que algún viajero se pregunte: «¿Por qué no la ‘isla Amazonas’ o la ‘isla de la jungla’?». Porque estar en las frondosidades de esta arboleda de laurisilva húmeda y espesa produce practicamente la misma sensacion.
Un poco de historia del ‘Amazonas español’
En la antigüedad, los bosques de laurisilva macaronésica se esparcían a lo largo de grandes extensiones de tierra del norte de África y el sur de Europa. Sin embargo, en la actualidad este tipo de bosques solo se dan en algunos rincones de Canarias, Madeira y Azores. El bosque de Los Tilos representa, de hecho, una de las extensiones de laurisilvas más importantes del planeta. Sus condiciones climáticas y geográficas, entre las que destacan su abundante y constante humedad, hacen que este frondoso bosque de hoja ancha se conserve desde hace millones de años.
Todo ello hizo que en el año 1983 este reducto fuera nombrado patrimonio de la UNESCO, además de Reserva Mundial de la Biosfera, el primero de los enclaves canarios en ostentar tal título. Asimismo, la actividad erosiva terminó por crear un profundo barranco, donde han aflorado nacientes y manantiales, entre los que destacan los de Marcos y Cordero, que son el destino final de una de las dos rutas más importantes de Los Tilos.
Las claves del bosque de Los Tilos
La importancia de este reducto del nordeste de La Palma radica en lo ya expuesto: la excepcionalidad de la laurisilva. Sin embargo, son varios los atractivos que deben de tenerse en cuenta al visitar la arboleda. En primer lugar, al hablar de este tipo de plantas, se habla también de flora y fauna autóctona y/o endémica. En el caso de la flora, tenemos ejemplos como la adelfa de monte o los azulejos, que dan nombre al lugar. Por lo que respeta a la fauna, se habla de especies como la paloma turqué o el lagarto tizón, endémico de Palma.
Pero si de lo que se quiere hablar es de planos que hacer en este lugar, hay que empezar por ir a la localidad de Los Sauces, que es el enclave desde el que acceder más fácilmente a la arboleda. Uno y otro enclave se encuentran a tan solo cuatro kilómetros entre ellos. El centro de visitantes de Los Tilos, con cafetería, exposiciones y salas temáticas es el punto perfecto desde el que empezar. De hecho, a tan solo unos metros del mismo se encuentra una de las localizaciones que más fama ha dado al parque: la cascada de los tilosbajo la que es posible remojar.
Obviamente, este paseo es fácil y el visitante quedará abrumado ante su belleza. Sin embargo, una perspectiva mayor del entorno la dará el sendero de 2,5 kilómetros que se introduce en el interior del bosque. Y, para aquellos que quieran una aventura mayor, se presenta la oportunidad en el sendero PR LP6, una ruta que conduce hasta los manantiales de Marcos y Cordero.
La ida y la vuelta de esta ruta lineal entre Los Sauces y los manantiales puede llegar a las siete horas y, además, es en ascensión. En este segundo caso, el visitante atravesará hasta 13 túneles excavados en roca. Canales, miradores, mares de nubes y, sobre todo, laurisilva se extienden a lo largo de un itinerario que hay que pensarse dos veces antes de hacer, pues puede llegar a ser peligroso. Por ello, es indispensable informarse con antelación en el centro de visitantes.
Rincones cercanos a Los Tilos
Al ser la isla de La Palma tan pequeña, casi podría decirse que cualquiera de sus rincones es un lugar cercano. Sin embargo, vamos a hablar de un sitio que está a tan solo 15 minutos del mismo y que puede ser perfecto para completar un fin de semana. Si, por ejemplo, nos hemos atrevido con la ruta de Marcos y Cordero, ahora queremos descansar un poco. Un chapuzón en las piscinas naturales del Charco Azul es perfecto para encontrar ese momento de sosiego. De hecho, en 2012 fueron declaradas como unas de las 10 mejores piscinas naturales de españa.
Este enclave pertenece al municipio de San Andrés y Sauces, donde además hay monumentos históricos como la iglesia de Nuestra Señora de Montserrat, la plaza de Nuestra Señora de Montserrat, la plaza de La Alameda, el parque Antonio Herrera o el casco histórico de la Villa. de San Andrés. En fin, lo que viene siendo darse cuenta de una vuelta por la localidad. Si aún se quieren más destinos, el Observatorio del Roque de Los Muchachos o el Parque Nacional de la Caldera de Taburiente son buenas opciones.
La gastronomía de la zona.
En La Palma, el viajero puede encontrar la gastronomía típica del resto de las Islas Canarias: las papas arrugadas con mojoel gofio o la vieja. También está el queso palmero, producto con denominación de origen especialmente habitual en las mesas de la isla bonita. Pero, además, en el municipio de San Andrés y Sauces disponen de un producto muy suyo: el cultivo de ñame, una planta herbácea que se consume como verdura o acompañamiento. Asimismo, es muy habitual utilizar este alimento en productos de repostería.
El cultivo de ñame requiere de un largo proceso de desarrollo y se hace de forma artesanal, transmitiéndose de padres a hijos y, aunque se cultiva en algunos barrancos de tenerife y La Gomerael municipio de San Andrés y Sauces es el mayor productor del mismo. Otro plato tipico de la zonaaunque también extendido por el resto de las Canariasson las raspaduras, un dulce elaborado a base de miel, gofio y almendras.
El primitivo bosque de Los Tilos es un recóndito lugar del Amazonas ubicado en La Palma que ha sobrevivido al paso del tiempo. Su paisaje es tan espectacular que incluso la serie de El Brujo decidió emplearlo como escenario de rodaje para representar un bosque encantado. Los juegos de luz y de sombras así lo hacen posible. Rutas para principiantes y expertos, chapuzones, belleza y naturaleza. ¿Qué más excusas son necesarias para visitar el ‘Amazonas español’?
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Autor: Eva Gruss
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