Convivir en nuestras llama con nuestras prisas, nuestras tiendas y nuestros parques. Históricas, sorprendentes, divertidas, clásicas, originales… Todas destinadas a convertirse en señas de identidad. A veces, ni nos fijamos en ellas porque forman parte del paisaje habitual. Otras, nos detenemos y descubrimos con admiración el talento de esos escultores que han sido capaces de dar vida a materiales como la piedra, el hierro, el mármol… Hoy hacemos precisamente eso, detenernos para admirar las esculturas más impresionantes de España.
Un recorrido por las esculturas de España.
El Peine del Viento (San Sebastián)
Si hablamos de esculturas impresionantes en España, tenemos que empezar con este conjunto escultórico de San Sebastian. Allí donde termina la ciudad, el escultor Eduardo Chillida ideó este conjunto escultórico de acero en los acantilados del mar Cantábrico. Una visita obligada a través de un agradable paseo junto al mar en esta ciudad que siempre nos deja con la boca abierta. El curioso nombre de esta escultura se debe al objetivo artístico, que no es otro que conseguir que las olas indómitas entren en la bahía peinadas por el viento.
Cachorro (Bilbao)
Una escultura sorprendente y original que ha dado la vuelta al mundo es la de Puppy. Hablamos de la mascota del Museo Guggenheim en Bilbao. Acostumbrados como estamos a las esculturas en piedra, en mármol y en otros materiales inertes, Puppy es una escultura diferente, hecha de flores.
Claro que la escultura floral, que recrea un encantador cachorro escocés de la raza West Highland White Terrier, se asienta sobre una estructura de acero y en total pesa unas 16 toneladas. Puppy se ha convertido en el lugar favorito de los viajeros para posar e, incluso, hay quien dice que se trata de la mascota artística más famosa del mundo.
Mamá (Bilbao)
En una ciudad de contrastes como bilbao no podía faltar el contrapunto a la emotiva escultura de Puppy. Así, recorriendo el exterior del Museo Guggenheim nos topamos con una escultura impresionante y al mismo tiempo inquietante. Una araña gigante de casi 9 metros de altura. elaborada en bronce, mármol y acero inoxidable. El prestigioso escultor Louise Bourgeois firma esta obra no apta para aracnofóbicos que no deja indiferente a nadie y que se ha convertido en una de las imágenes más representativas del museo.
Monumento a los Castellers (Tarragona)
Una costumbre ancestral que además ha sido declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad Sin duda se merece un gran monumento. Hablamos del Castell, una torre humana de varias alturas que se construye, anualmente, durante las fiestas de Cataluña, Baleares y Comunidad Valenciana. A cada una de las personas que forman parte de esta torre se la conoce como casteller. Y es precisamente esto lo que representa una de las esculturas más impresionantes de España.
Ubicada es Tarragona y diseñada por el artista Francesc Anglés, la escultura impresiona, no solo por sus 11 metros de altura, sino también por el realismo con el que el bronce plasma la magia de este particular castillo de personas. Personas, por cierto, entre las cuales se descubren rostros conocidos como los de Pablo Picasso o Joan Miró.
Fuente de Cibeles (Madrid)
Podríamos hacer una lista interminable de las esculturas de Madridpero vamos a centrarnos en las más representativas, en aquellas que se han convertido en símbolo de la ciudad. Una de ellas es el conjunto escultórico de la fuente de cibelesmundialmente conocida por ser el escenario de las celebraciones deportivas del Real Madrid.
El arquitecto Ventura Rodríguez diseñó esta fuente que representa a la diosa Cibeles oa la Madre Tierra sobre un carro tirado por leones. Francisco Gutiérrez fue el encargado de cincelar las figuras de la diosa y el carro, mientras que los leones corren a cargo de Roberto Michel.
El Oso y el Madroño (Madrid)
Protagonista de canciones e imagen recurrente de Madrid es la escultura de El Oso y el Madroño. La escultura, hecha en piedra y bronce por Antonio Navarro Santafé, lleva en la Puerta del Sol desde el año 1967. Por su ubicación, es imposible no toparse con ella. Ni siquiera el viajero más despistado puede evitar toparse con esta representación del escudo de la Villa que, además de ser otro de los símbolos de Madrid, es todo un éxito en Instagram.
La Dama de Elche (Madrid)
Vamos a entrar un momento a uno de los mejores. museos de madrid. Porque en el Museo Arqueológico Nacional nos encontramos con una de las esculturas de España más fascinantes. Se trata de la Dama de Elche, un busto realizado en piedra caliza que data de los siglos V-IV aC. Esta dama, originaria de Elche, sigue atrayéndonos por su belleza y por su misterio. ¿Es una señora de la alta sociedad del pueblo íbero o se trata de una sacerdotisa?
El Gato de Botero (Barcelona)
Si Puppy se ha convertido por derecho propio en la mascota del Museo Guggenheim, el Gato de Botero es la mascota de la ciudad de Barcelona. Sus grandes dimensiones no le restan emotividad a este gato elaborado en bronce que ha vagado sin rumbo fijo por la ciudad desde el año 1987. Tuvo que esperar hasta 2003 para encontrar su ubicación actual, la Rambla del Raval, donde parece que se ha integrado a la perfección con habitantes y turistas.
Las esculturas de Oviedo (Asturias)
Un lugar en el que las esculturas no dejan de sorprender es Oviedo. Por sus calles se encuentran vendedores de pescado, lecheras, representaciones de la maternidad, caballos asturcones, pensadoras, gitanas, guisanderas, leones o bailarinas. Todas y cada una de las esculturas de Oviedo han encajado tan bien en el paisaje urbano que los viajeros no pueden descartar ninguna a la hora de hacerse un autofoto. Hay incluso una ruta de esculturas orientada a los turistas, cuyas preferencias se decantan por la escultura de Woody Allen, El Viajero, la literaria Regenta y Mafalda.
Monumento a Bécquer (Sevilla)
Buscando lugares románticos en Sevilla el viajero puede que se encuentre con el impresionante Monumento a Bécquer, Ubicado en el Parque de María Luisa.. A los pies de un enorme ciprés se asientan las diferentes figuras de mármol y bronce de este conjunto escultórico. Entre ellas, un hombre tendido representan en el suelo roto de amor y un Cupido, rondando a las tres damas que, respectivamente, al amor ilusionado, al amor poseído y al amor perdido.
Autor: Laura Vélez
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